Las personas con discapacidad siguen encontrando muchas dificultades a la hora de encontrar trabajo. Según un estudio realizado por la Associació Empresarial de Economia Social Dincat y la escuela de negocios IESE, tan solo el 25% de las personas con discapacidad tiene un empleo.
Estos datos empeoran si tenemos en cuenta que tan solo el 35% de las personas con discapacidad se encuentran en edad laboral frente al 78% de población activa entre las personas sin discapacidad.
Estos datos han sido recogidos en el “Libro Blanco de la Discapacidad en Cataluña”, el cual propone dotar de herramientas a las entidades, las empresas, los gobiernos y las familias. Su objetivo es claro, “que el sistema laboral sea más inclusivo y mejore las perspectivas de los discapacitados”.
En este, se recogen las limitaciones y defectos del sistema de trabajo actual, para lanzar propuestas de futuro.
Una discriminación positiva para las empresas
Además, los centros que reciben a discapacidad obtienen el 50 por ciento del Salario Mínimo Interprofesional por parte del Estado, con independencia del tipo de discapacidad que tenga. Además, están exentas del 100% en las cuotas de la Seguridad Social.
Aun así, el estudio refleja los puntos débiles del marco legal español en materia de empleo, por lo que recomiendan que se dé una discriminación positiva para las entidades de la iniciativa social. A esta se le une un proceso de cocreación entre los agentes implicados.
Por ello piden que se establezca el desarrollo pleno de la empleabilidad para el colectivo de discapacitados. Además, exigen que se dé mayor importancia a la formación, que haya flexibilidad y adaptación al ciclo vital de la persona.