Nuestro día a día está repleto de un sinfín de obligaciones laborales, las clases en la Universidad, cursos de formación; compromisos familiares, eventos, reuniones… y de vez en cuando necesitamos relajarnos y cuidar nuestro bienestar interior y exterior.
Por eso, aprovechamos el tiempo de ocio para disfrutar de espacios wellness en los que dedicarnos exclusivamente al relax, recibiendo masajes y tratamientos que alivien las tensiones corporales acumuladas, nadando en las piscinas climatizadas, liberando toxinas en los baños turcos, etc.
Y es que todos deberíamos poder tener acceso a este tipo de espacios porque, con el ritmo de vida actual, se ha convertido prácticamente en una necesidad y no solo en un capricho de lujo como se consideraba en un principio.
Justamente por esta razón han ido naciendo spas accesibles para todo tipo de personas o se han ido construyendo spas adaptados para aquellos grupos de población con algún tipo de discapacidad física que necesitan de unas instalaciones especiales.
Instalaciones de spas adaptadas a personas con discapacidad
Así, podemos encontrar jacuzzis que cuentan con sillas mecanizadas externas que se introducen en la «bañera» y facilitan la inmersión del usuario, pudiendo manejar el aparato incluso de forma autónoma; sillas-carrito transportables por toda la superficie del spa para poder facilitar el acceso a las piscinas desde cualquier punto; etc.
Aparte de esto, también es necesario que los spas cuenten con personal especializado como monitores o fisioterapeutas para que puedan asistir a los usuarios en el proceso de cambio de vestimenta, traslado a las piscinas…
Terapias y tratamientos de spa especializados para discapacitados
En cuanto a la parte de las terapias y tratamientos, al tratarse de servicios más personalizados en cabinas privadas, la labor de adaptación es mucho más sencilla y permite que prácticamente cualquier usuario pueda aliviar sus dolencias o recibir un masaje relajante sin barreras de prácticamente ningún tipo.
Hoy en día puedes encontrar spas adaptados por toda la Península, como por ejemplo en:
El spa del Hotel Rural Piedra y Luz (Lérida, Cataluña).
Magma Spa (Gerona, Cataluña).
Termaria, Casa del Agua (La Coruña, Galicia).
Almughaa Andalusi (Córdoba capital, Córdoba).
El Spa del Hotel Fuerte El Rompido (Cartaya, Huelva).
Alisia Orio (Guipúzcoa, País Vasco).
Spa del Hotel Fontecruz (Granada capital, Granada).
Hotel Spa Bienestar Moaña (Moaña, Pontevedra).
En un Spa confluyen muchas terapias: el clásico circuito termal de agua caliente, los jacuzzi con sus chorros a presión, las cascadas, los baños de agua fría, las saunas y los baños de vapor, losmasajes y tratamientos que ofrecen… Y cada uno de estos elementos tiene unos beneficios no sólo para nuestro bienestar físico, también para nuestro bienestar psíquico.
Los principales beneficios físicos de las terapias Spa son:
Relajación muscular gracias al agua templada, por lo cual se alivian los dolores musculares, de espalda y lumbares.
Efecto anti-inflamatorio y sedante para mejorar la artritis, artrosis, lumbalgias, migrañas, reuma… gracias a la desinflamación de los músculos.
Mejoran las alteraciones de las vías respiratorias y las despejan, gracias a sus vapores expectorantes, a la vez que mejoran la fluidez de la mucosidad.
El agua caliente y las saunas y baños de vapor abren los poros de la piel y favorecen la eliminación de toxinas a través del sudor.
El contraste entre agua fría y agua caliente mejora la circulación de los vasos sanguíneos gracias a su dilatación y constricción.
Pero las terapias Spa tienen también beneficios psicológicos… y es que hay una razón por la cual acudir a un balneario es la primera opción para mucha gente que trabaja duro durante la semana. La sensación de relajación que provoca estar rodeado de agua es casi inimitable. El Spa se convierte en un lugar donde liberar las tensiones del día a día, olvidar el estrés, y reponer fuerzas para la siguiente semana. Nos aísla durante unas horas del exterior para que nos centremos en lo que realidad importa: en nuestro cuerpo y en consecuencia, en nuestra mente, disminuyendo los niveles de ansiedad. Además, tomar un baño Spa a primera hora de la mañana ayuda a despejarnos, mientras tomarlo antes de ir a dormir nos ayuda a conciliar el sueño.